La crítica de la razón pura, pt. 1/9

En este primer vídeo sobre el célebre libro de Kant analizamos el contexto histórico, tanto intelectual como socio-cultural, que incide en el pensamiento de Kant, pensamiento que logra consolidar los ideales de la Ilustración.

Guión

 La Crítica de la razón pura es uno de esos libros que sabes que es importante, sabes que debes leerlo, pero ahí permanece en el estante. Lo bajas de vez en cuando, lo hojeas y ves una frase como “analítica trascendental” y de inmediato lo devuelves a su lugar. Entiendo tu miedo, pero tarde o temprano, todo alumno serio de filosofía tiene que hacer frente con este libro y dominarlo. Tú me dices: Maestro, ya sé, estoy dispuesto a ponerme a la tarea, pero ojalá tratara de un tema más interesante o apasionante. Nuevamente, te entiendo. El poeta Heinrich Heine dijo que este famoso libro de Kant es abstracto, tieso, seco e insulso. Es verdad, una obra maestra literaria no es. Pero la Principia matemática de Newton también es abstracto y seco; no lo vas a llevar a la playa para leerlo bajo una palmera, sin embargo es una obra de incomparable valor porque logra explicar la conducta del mundo de una forma abarcadora y sistemática. Sus ecuaciones son como un lente que nos hace ver el cosmos que nos rodea de una forma completamente nueva y poderosa. Si alguien nos hace ver el cosmos de una forma novedosa, entonces lo que nos da es una “cosmovisión”.
La obra de Kant hace algo muy parecido, aunque el cosmos que nos hace ver no es un mundo de objetos físicos como planetas, sino un mundo de ideas. Cualquiera que haya cursado la carrera en filosofía sabe que Kant resolvió el conflicto entre las ideas del racionalismo y las del empirismo con respecto a la naturaleza del conocimiento. Sin embargo, la filosofía de Kant es mucho más que un capítulo en la historia de la epistemología. El mundo conceptual que crea, al igual que las ecuaciones de Newton, recoge los diversos valores, ideas, prácticas e instituciones que habían surgido en los últimos 200 años y los pone en órbita alrededor de unas ideas centrales, creando así el baile celestial que conocemos hoy en día como la Ilustración. Para apreciar a fondo el logro de Kant y el alcance de este gran libro, hay que entender el contexto histórico de los problemas y conflictos, tanto intelectuales como sociales, que hicieron necesarias sus ideas.
Kant nació en Königsberg, una ciudad importante en lo que en aquel entonces se conocía como Prusia, en 1724. Si volamos en el tiempo 500 años atrás y en el espacio 1,500 kilómetros al sur de Königsberg, nos encontramos en el Nápoles del siglo XIII. ¿Por qué estamos aquí? Por este señor, Sto. Tomás de Aquino. Sto. Tomás era para el medievo lo que Kant era para la Ilustración. Su logro consiste en haber forjado una síntesis entre la teología cristiana y la ciencia natural de Aristóteles en la que la fe y la razón, Dios y el mundo natural, forman una totalidad continua, sistemática y coherente.
Es relativamente fácil entender las ideas de esta síntesis pero mucho más difícil ponernos en los zapatos de un hombre medieval común y corriente para saber cómo percibía su mundo. Una diferencia clara entre su mundo y el nuestro es la tecnología: tenemos coches, aviones y computadoras. Pero eso no es el único ni el más importante cambio que ha habido en los últimos 800 años. Es decir, no somos simplemente hombres medievales volando en aviones. La diferencia más profunda es la cosmovisión. Para ellos, el mundo se experimentaba como una unidad sólida y segura en el que todo se relacionaba como las piezas de un rompecabezas, cada parte en su lugar señalando algún aspecto del plan divino. Nosotros en cambio vivimos en un pluralismo a veces caótico y muy cambiante que no manifiesta ningún sentido claro y evidente. ¿Qué pasó con esa gran síntesis de Sto. Tomás para que llegáramos hoy en día tan transformados?
Bueno, su síntesis no duró mucho tiempo. Empezó a desmoronarse unos siglos después con el Renacimiento y especialmente con la revolución científica de los siglos XVI y XVII. El trabajo de Francis Bacon, Copérnico, Galileo y el mismo Descartes dio un golpe fuerte a cuestiones teológicas. En efecto, el trabajo colectivo de estos primeros científicos fue como una escoba que barrió del cosmos todo rastro de las formas sustanciales y causas teleológicas de Aristóteles y que puso en su lugar un mundo puramente material. En esta nueva ontología científica sólo había cuerpos materiales que se movían en un espacio descrito por las coordenadas cartesianas. El lenguaje de los curas, basado en la fe, estaba dando paso al lenguaje de los científicos basado en las matemáticas. En otras palabras, el conocimiento del medievo, que se basaba en la autoridad y la revelación divina, estaba desmoronándose ante un nuevo marco epistémico, uno que se centraba en la razón humana.
La ciencia amenazaba no sólo a la religión, sino a la moralidad también. ¿Por qué? Pues, para que un acto se considere moral, tiene que ser libremente escogido. Sin embargo, las leyes de la naturaleza que la razón científica descubre son universales y necesarias. Una piedra no escoge caer hacia abajo cuando se le suelta, sino que es obligado a caer por la ley de la gravitación. Los seres humanos son parte de la naturaleza y si sus leyes son universales entonces parecería que estamos sujetos a las mismas. Si es así, entonces la conducta humana no es libre sino forzada, como la caída de la piedra. Para muchos, ésta era una consecuencia impensable. El problema es que, al insistir en el libre albedrío se pone límites a la propia fuerza de la ciencia: su universalidad y necesidad.
La Ilustración es un fenómeno complejo que cuenta con aportes de muchos individuos de diferentes países a lo largo de dos siglos. Sin embargo, la razón es el motor que la potencia en todas sus vertientes. Kant decía: “Sapere aude” – “Atrévete a saber”. Es interesante que utilice ese verbo “atreverse” como si el uso de la razón requería de valor. Bueno, en aquel entonces sí. Anteriormente, todo lo que uno tenía que saber, de Dios o del mundo que le rodeaba, lo dictaba la iglesia. Cuestionarla era impensable. El mensaje de la Ilustración era que cada quien se emancipara de esa inmadurez de sometimiento a la autoridad y que, de forma autónoma, razonara sobre la naturaleza del mundo y el papel del hombre en él. La verdad estaba al alcance de todos. La idea era que con esta emancipación intelectual, una emancipación política sería su consecuencia. Eso lo vemos en la revolución francesa en 1789 y su lema de “liberté, egalité, fraternité”. Aunque estemos lejos en el tiempo del Siglo de las Luces, somos herederos de sus ideas. Los ideales de la libertad, la autonomía y el progreso están a la base de nuestras instituciones científicas, políticas y económicas. Sin embargo, esta cultura ilustrada no se forjó de la nada. Su conformación fue un proceso difícil tanto política como intelectualmente. Volvamos entonces al reto que la ciencia representaba para la religión.
Para recordar, la nueva ontología que planteaba la ciencia era una en la que Dios no aparecía. Sin embargo, los científicos e intelectuales europeos no se convirtieron de golpe en ateos, ya que, aun cuando la ciencia no pudiera revelar nada sobre Dios, la moralidad exigía su existencia. Como diría Dostoyevski en el siglo IXX: “Si Dios no existe, entonces todo es permitido”. Entonces, Dios seguía vivo en Europa pero ahora constituía un problema epistemológico muy fuerte. ¿Cómo tratar cuestiones religiosas? Desde la ciencia no, pero tampoco, en esta época de medición, experimento y conocimiento científico, podía la religión basarse simplemente en la fe. La religión, más bien, tenía que basarse en la razón. Ahora, el método científico nos permite hacer predicciones bastante precisas, pero lo que no puede captar son cosas como el orden de la naturaleza o sus leyes. Esos fenómenos no son objetos físicos, no pueden medirse. Son más bien objetos metafísicos que se captan con la razón. Siguiendo esta lógica, los filósofos de este tiempo empezaron a tratar Dios como un objeto racional. Esta forma de pensar a Dios se llamaba teología natural, la cual el mismo Sto. Tomás manejaba con sus célebres argumentos sobre la existencia de Dios que vimos en otro vídeo, el argumento teleológico, el cosmológico, etc. Éste es el famoso Dios de los filósofos, más un principio abstracto que un ser vivo y protector. Es en este último, el Dios de la Biblia, que la gente cree. Entonces, a pesar de acomodar a Dios en el nuevo marco epistémico, persistía una sensación de conflicto. La misma razón humana se utiliza para develar un mundo materialista y mecánico y al mismo tiempo su contrario, un mundo divino.
Este conflicto de la razón se expresaba muy bien en la obra de Leibniz y de Newton. Leibniz razonaba en la tradición racionalista, partiendo de ideas generales y deduciendo hechos particulares. Newton razonaba en el sentido contrario, midiendo los hechos observables para llegar a primeros principios. El conflicto consiste en que, al usar los dos la razón humana, llegaron a conclusiones distintas sobre varios puntos importantes, especialmente sobre la naturaleza del espacio y el tiempo. Ahora bien, uno diría que Leibniz estaba haciendo metafísica y Newton ciencia y que por tanto deberíamos confiar en los resultados de Newton. Pero no es así. Si uno dice que el tiempo es absoluto e infinito y el otro dice el contrario, ¿qué posible experimento podría falsear esas hipótesis? Ninguno. Son cuestiones propiamente metafísicas que ningún dato empírico puede justificar. Entonces, tenemos dos descripciones racionales de la realidad, productos del ejercicio de la razón, que llegaron a conclusiones opuestas. El problema es que los argumentos racionales de la teología natural, que apoyaban la existencia de Dios, se encontraban ahora amenazados por un uso científico de la razón. La autoridad de la iglesia al menos era única e incuestionable. El ejercicio de la razón que tomó su lugar empieza a verse algo endeble, o al menos no tan apodíctico como la palabra de Dios.
En las primeras páginas de La crítica de la razón pura, Kant describe el campo de la metafísica como un campo de batalla. Uno de los que se sumaron al combate era David Hume. Hume debilitó la razón al afirmar que nuestras creencias sobre el mundo no se basan en la razón, en la estructura lógica del pensamiento, sino en ciertos hábitos de la mente como las de comparación y asociación. La causalidad, por ejemplo, no es algo que la razón descubre en el mundo sino que es producto de asociar dos cosas que suceden de forma contigua, una como causa y la otra como efecto. Si Hume tiene razón, por así decirlo, entonces no sólo la religión carece de una base racional, sino la propia moralidad también. El mundo, según su empirismo, sólo nos dice lo que es el caso, más no lo que debería ser.
Hace poco mencioné la Revolución Francesa. Aunque tuvo su lado oscuro, me refiero a las matanzas del Terror que la siguió, la revolución se basaba en los ideales de la Ilustración que hemos mencionado. Lo curioso es que la persona que se considera el padre de la revolución, Jean Jacques Rousseau, fue uno de los primeros grandes críticos de la razón ilustrada. De acuerdo con los ideales de la Ilustración, Rousseau defendía la autonomía y la libertad, sin embargo, negaba que pudieran ser frutos de la razón. Como vimos en mi serie de vídeos sobre Rousseau, la razón es un instrumento calculador que crea divisiones y jerarquías artificiales que sólo sirven para disolver los lazos sociales y a esclavizar al hombre en un espejismo de individualidad y competencia. Rousseau responde a este problema planteando una sociedad basada en la voluntad general, la cual la posibilita no la razón sino el sentimiento humano.
La Ilustración se plantea normalmente como un conflicto entre la razón y la fe, entre la ciencia y la religión, pero creo que es más provechoso ver su división principal entre la autoridad institucional (sea la iglesia o el rey) y el individuo. De esta forma podemos ver la dinámica de la Ilustración dándose dentro de la propia religión en la persona de Lutero. Al igual que los filósofos y científicos, Lutero rechazó la autoridad de la iglesia católica, basando la salvación en el individuo y su relación personal con Dios. Sin embargo, esta relación no va en función de la razón sino del corazón. Consideraba la razón una bella prostituta, la novia del demonio.
Entonces, tenemos una situación compleja de compromisos encontrados: la ciencia de Newton contra la metafísica de Leibniz; el escepticismo empírico contra el dogmatismo racionalista; y la cosmovisión científica contra la moralidad y la religión. En la época medieval, Dios, el mundo natural y la moralidad formaban un tejido orgánico que la autoridad de la iglesia garantizaba. En la época moderna, que se centraba en el individuo, esa solidez se esfumó. Para conocer al mundo natural, el empirismo científico enseñaba una forma de usar la razón y el racionalismo lógico otra. Las contradicciones que surgían ponían en tela de juicio la naturaleza y alcance de la razón. En todo caso, la religión y la moralidad salieron perjudicadas ante el nuevo marco epistémico. Aun cuando Dios y el bien no podían tratarse físicamente desde la ciencia, seguían siendo objetos racionales que podían tratarse desde la metafísica. El problema es que el retrato que la razón hace de Dios y la moral es muy abstracta y seca; es algo que difícilmente podría llevar a uno a creer o actuar. La crítica a la razón no era sólo epistemológica como en el caso de Hume, sino moral también, como en el caso de Rousseau. El célebre francés junto con alemanes como Herder y Jacobi señalaban las consecuencias negativas de la razón y resaltaban el lado afectivo del individuo. La vía del sentimiento es una forma de recuperar cuestiones religiosas y morales, pero al costo de debilitar la razón científica.
En fin, este complejo entramado de racionalismo, empirismo y sentimentalismo y sus consecuencias intelectuales, políticas y religiosas es la situación en la que se encuentra Kant. Su Crítica de la razón pura es su respuesta. En ella analiza la naturaleza de la razón y su alcance para saber en qué medida es posible la metafísica, es decir, bajo qué condiciones podemos razonar sobre fenómenos como Dios, el alma, la libertad y el propio mundo natural. En el próximo vídeo empezamos su lectura.

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Bajar el guión de las 9 partes en un solo PDF: https://drive.google.com/file/d/1gNbldSBI_bOgsX_jmVSmtYrM-bgjfEY5/view?usp=sharing
Doy las gracias a Diego Cardona por la edición.

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74 Comments

  1. amellia · 24/05/2015 Responder

    Espero ansiosamente el pximo video, así, definitivamente, me amigo con Kant ,saludos desde Buenos aires.

    • Darin · 24/05/2015 Responder

      Gracias Amelia. Ya he empezado el guión de próximo vídeo, un abrazo!

      • Ivette · 19/03/2016 Responder

        Darin
        Buen dia
        Excelente explicación…muchas gracias por compartir este vídeo.
        Me gustaría escuchar el tema:
        Juicios demostrativos en Kant
        Hipotéticos
        Disyuntivos
        Categóricos
        Asertorios

        • Darin · 19/03/2016 Responder

          Hola Ivette, gracias. Trato esos temas brevamente más adelante en la serie (no recuerdo qué vídeo).

          • Francy Lorena Osorio · 15/04/2016

            Buenos días Darin, necesitaba preguntarle si ha subido algún video sobre el pensamiento de Husserl, tengo que escribir sobre él y me parece muy complejo de entender, pero con sus videos lo complejo se vuelve mas sencillo. Mil gracias.

          • Darin · 15/04/2016

            Lamentablemente nada sobre Husserl todavía.

    • ana · 23/09/2015 Responder

      Darín:
      Mil gracias por tu esfuerzo y por compartir tu trabajo. Tus vídeos me son de una gran ayuda para mis estudios de filosofía. Gracias por ayudarnos a pensar.

  2. Alejandro Acevedo Ibáñez · 24/05/2015 Responder

    Como de costumbre, claro y didáctico. Quizá hubiera sido interesante que mencionaras a San Agustin y su libro El Maestro, que sin duda influyo mucho en el concepto de la procedencia del conocimiento.
    Saludos.

    • Darin · 24/05/2015 Responder

      Gracias Alejandro! Sí, hay muchos detalles en esa historia. Tuve que recordar para no excederme. Un abrazo!

  3. Natalia Aguirre · 24/05/2015 Responder

    Gracias por la gran ayuda! Tus relatos han influido de manera muy positiva en mis estudios de Historia. Otro saludo desde Buenos Aires.

  4. Patricia King · 24/05/2015 Responder

    Gracias, Darin!
    Espero tu próximo video.
    Saludos,
    Patricia

  5. HAROLD LEON M. · 25/05/2015 Responder

    No pudo ser mejor la invitación al estudio de la filosofía de Kant. Con mucha expectación esperamos lo que sigue.

  6. Rodrigo Villanueva · 25/05/2015 Responder

    Excelente introducción, espero con ansias consumistas las siguientes entregas, un saludo Dr.!

    • Darin · 25/05/2015 Responder

      Gracias Rodrigo!

    • Ricardo · 13/08/2020 Responder

      No escuché ningún video sobre Spinoza. Lo mejor que leí son las clases de Deleuze en La Sorbona: En medio de Spinoza. Me encanta tu forma clara y concisa de explicar. Muy bueno tu trabajo!!

  7. HORACIO · 25/05/2015 Responder

    Muy bueno amigo,tus videos son muy claros !!!felicitaciones!!! Espeo con ansiedad los siguientes,,muchas gracias

  8. Eduardo P Osswald · 25/05/2015 Responder

    Qué alegría Darin; no sólo estaré esperando los próximos vídeos sino que se los voy a pasar a mis estudiantes, quizás tengamos más éxito juntos.
    Un abrazo

  9. Angel Barón Da Conte · 25/05/2015 Responder

    Un tema difícil y arduo para abordar, gracias por estas clases!

  10. romel rodriguez · 25/05/2015 Responder

    en base a esto, confirmo que mientras la razon, se ocupa del pensamiento, conocimientos, conceptos, opiniones en general. La fe, la imaginacion, los sentimientos, y la mala memoria, se ocupan de cuestiones metafisicas como la religion, la supersticion

    • Darin · 26/05/2015 Responder

      Hola Romel. Kant dice que pone límites a la razón para dejar espacio para la fe. Ya veremos qué dice al respecto. Hasta pronto!

  11. Ricardo Herrera · 26/05/2015 Responder

    Estimado Darìn :
    Anteriormente solicite sobre Platòn y Socrates, pero permitame felicitarlo pues estoy siguiendo todos los vídeos, la verdad que se aprende mas de lo que imagina, sobre todo esta dirigido a todos aquellos que quieren conocer y aprender de la Filosofía (sobre todo la Moderna).
    Como me gustaría que viniera a Lima Perú y dictar por lo menos uno de esos vídeos que engrandecen al hombre.

    • Darin · 26/05/2015 Responder

      Hola Ricardo. Me encantaría conocer a Lima. Ojalá un día pronto, si surge la posibilidad te aviso. Un abrazo!

  12. Noel Yufera · 26/05/2015 Responder

    Muchas gracias Darin. Gracias por poner estos estupendos videos, que podemos disfrutar y aprender tanto
    de ellos.
    Desde Alicante (España)

  13. victor · 27/05/2015 Responder

    Muchas Gracias. Una presentación introductoria precisa. Espero con ansia la lectura de Kant.

  14. Graciela · 27/05/2015 Responder

    Me alegra iniciar esta nueva serie de videos. Soy una de esas personar que tomó la CRP y la devolvió a la biblioteca. Espero ahora poder saber de que se trata, con tu ayuda generosa y brillante. Muchas gracias
    Graciela, desde Buenos Aires

  15. Richard Bernal · 30/05/2015 Responder

    Darin. Buenas noches, siempre es muy reconfortante escuchar tus charlas y poder decir algo al respecto, así no ayude mucho a complementar o a ampliar el tema del cual hablas, en esta ocasión hablar de Kant y Santo Tomás de Aquino me remite a las aulas de filosofía de la USTA en Bogotá Colombia, ellos formaron mi pensamiento, leyéndolos comprendí dos cosas: de Santo Tomás de Aquino que una cosa es la fe y otra la razón, de las dos la más valiosa es la espiritual. Desde Kant, que para interpretar la realidad lo realmente valioso es la capacidad del investigador para diseñar procesos experimentales y poder producir conocimiento nuevo. Pero creo que lo que los une a los dos es que intentan integrar el conocimiento del todo, el uno desde Dios y el otro desde la ciencia, es algo interesante notar lo mismo en la siguiente cita: Según (Capra 2012:35) “Nuestra tendencia a dividir el mundo que percibimos en cosas individuales y separadas y a vernos a nosotros mismos como egos aislados se considera una ilusión, creada por nuestra mentalidad medidora y clasificadora. En la filosofía budista se le llama avidya o ignorancia, y es considerada un estado mental confuso que se debe superar” Ellos buscan ver el universo como una totalidad, por eso creo que los pensadores van por un lado y demás por otro.

    • Darin · 31/05/2015 Responder

      Hola Richard. Me da gusto que el vídeo te haya llevado a esa reflexión y a recordar lo que aprendiste en tus estudios. Hasta el budismo te llevo! Ya debo volver a terminar esa serie. Ya pronto. Un abrazo Richard!

  16. Maria Elena Molinari · 13/06/2015 Responder

    El profesor Oswwald recomendo este video para reforzar los conceptos de Kant, q no son muy sencillos.
    Que buena idea la del profesor!! Celebro haberlos encontrados a ambos por lo mucho que me estan enseñando.
    Uno, personalmente, el otro en forma virtual.
    Lo pude aprovechar con satisfaccion.
    Gracias!!!

  17. Daniel · 11/07/2015 Responder

    Excelente y muy clara disertación sobre Kant y su obra capital. Creo que ahora sí me voy a aventurar a la lectura de Crítica de La Razón Pura. Saludos desde Caracas

  18. Diego · 06/08/2015 Responder

    Hola¡¡ Me llamo Diego, tengo 55 años y escribo desde España. Como creo que decía Epicuro, nunca es tarde para acercarse a la filosofía (o algo así). He encontrado en tus exposiciones una claridad que conmueve, aunque pueda resultar paradójico (razón versus emoción). No obstante creo que hay una relación entre ambas, más o menos sutil.
    Me gustaría seguir todo lo relacionado con la web (nuevos videos, comentarios, etc)

    • Darin · 06/08/2015 Responder

      Hola Diego, me alegro que hayas encontrado mis vídeos y que te hayan gustado. A veces creo que es mejor descubrir la filosofía siendo un poco más grande ya que uno está un poco más estable económica y emocionalmente y puede dedicarse a reflexionar tranquilamente sobre estas grandes cuestiones de la vida y la existencia. En todo caso, me da gusto tenerte en la Fondo. Hasta pronto y un abrazo!

  19. Juan Carlos · 06/10/2015 Responder

    Agradezco la buena voluntad y el desprendimiento con su trabajo, con su trabajo disfruto y aclaro el mundo de la filosofía. Mil y mil gracias y buen provecho.

  20. marisol · 31/10/2015 Responder

    muy buena explicación!

  21. Miguel Ángel Balaguer · 28/11/2015 Responder

    A ver si me animo a ver toda la serie de Kant y enterarme un poco de qué va toda su teoría. ¡Gracias por tus vídeos!

  22. Maria Flores · 14/12/2015 Responder

    Buenas tardes ,yo encuentro muy interesante tu pagina ,tambien te sigo en youtube ,buscando un audio-libro de Jean Paul Sartre “El existencialismo es un humanismo” fue que me encontre con tus videos ,y realmente me han aclarado muchas interrogantes ,muchas gracias por compartir con nosotros tus conocimientos … hasta pronto

  23. Federico · 28/12/2015 Responder

    Hace unos dias empece con este libro y tengo que leer una página, volver y leerla nuevamente y volver nuevamente!! Pero me genera placer aprender sobre estos temas (por mas que soy estudiante de economía), tus videos me ayudan un montón!!! Saludos y muchas gracias

  24. Federico · 28/12/2015 Responder

    Hace unos dias empece con este libro y tengo que leer una página, volver y leerla nuevamente y volver nuevamente!! Pero me genera placer aprender sobre estos temas (por mas que soy estudiante de economía), tus videos me ayudan un montón!!! Saludos y muchas gracias

    • Darin · 28/12/2015 Responder

      Hola Federico. Sí, con Kant uno tiene que dar muchas vueltas pero tarde o temprano se van las nubes y sale el sol!

  25. Enrique Pacheco · 10/02/2016 Responder

    Excelente presentación felicidades, gracias por permitir abrir nuestro panorama

  26. Hugo Palomino · 14/02/2016 Responder

    Mi cabeza se mueve en la penumbra
    Borrosas imágenes llegan a mi mente
    Mi mente se chifla y arriesga dejar la cueva
    En la puerta alegremente me saluda Platón
    Dándome la bienvenida a Topos Uranos.

    Mi cabeza consume su filosofía
    Quiero en mis sesos todos los conceptos
    Hasta que estos se apropien de la realidad
    Para con Hegel alcanzar el saber absoluto
    Donde todo lo real es racional y viceversa.

    Visito con Descartes lejanas civilizaciones
    Descubro los motivos de sus extraños gustos
    Costumbres, hábitos, creencias, artes…
    Dudo sin temor de absolutamente todo.
    Pero no puedo dudar, que estoy dudando.

    Vago por calles oscuras y silenciosas
    Dejo que el viento haga añicos mi cabeza
    Que sus fragmentos vuelen por el aire
    Hasta que el loco infinito los devoré
    Antes de saltar a la fe con Kierkegaard.

    Me muevo entre hacinados barrios obreros
    Con cuerpos bien ataviados y rostros tristes
    Claman estar muriéndose de hambre
    Están hambrientos de una liberación
    “Proletarios de todos los países uníos.”

    Rechazo la trascendencia de Dios
    Mi cabeza panteísta se libera, Él existe
    En todas la cosas cercanas y distantes
    Con Spinoza digo que solo los tontos no ven
    Que hay chispa divina en la naturaleza.

    Mi cabeza sigue sin vacilar a Nietzsche
    Demasiado tiempo habitamos en el deseo
    Nuestros ojos se cansaron de la lejanía
    Ya moramos mucho en la soledad
    Así que, para que debemos callarnos ahora.

    Lo sé, lo sé, mi cabeza clama por una pipa
    Por enésima vez las palabras de Wittgenstein
    Se clavan en la corteza de mi cerebro,
    Si, si, “El mundo en todo caso. Es lo que es.”
    Filosofar es sacar la mosca de la botella.

    Esta cabeza chiflada clama por Kant,
    Sartre, Freud, Foucault, Derrida,
    Deleuze, Heidegger, Schopenhauer,
    Althusserl, Bouvier, Lacan, Darwin…
    Para acallar el ruido conformista del planeta
    Cenaré en la Fonda Filosófica.

  27. Mary · 27/10/2016 Responder

    ¿Pero para ser feliz, que se debe hacer ?

    ¿ como se mide la razón ?

  28. Paris A. Román Gutiérrez · 20/01/2018 Responder

    Hola Darin,

    Después de ver y escuchar buena parte de tus videos tengo mucho que decir pero prefiero callar hasta que sea el momento adecuado para hablar de temas particulares de la filosofía. Sólo te diré que estoy volviendo a experimentar el ánimo y optimismo que para mí viene de ejercitar la libertad de pensar la cual practicamente había abandonado pero a la que nunca renuncié, y que tu me estas ayudando a recuperar. Volver a sentirme joven intelectualmente a mis 60 ha sido un gran obsequio.

    Gracias,

    Saludos maestro,

    Paris

    • Darin · 21/01/2018 Responder

      Hola Paris. Me da mucho gusto que haya podido ayudarte un poco en revivir el pensar. Te mando un fuerte abrazo 🙂

  29. alejandro guardiola · 28/02/2018 Responder

    Hola Darin.
    Tengo una duda, no me quedo claro la diferencia entre razón y racionalismo.
    Gracias por tus videos.
    Saludos
    Alejandro

    • Darin · 01/03/2018 Responder

      Hola. Mmm, el racionalismo es una doctrina epistemológica acerca de cómo entender y abordar el fenómeno del conocimiento, y la razón pues es la facultad de pensar.

  30. Marco Lopez · 14/04/2018 Responder

    Yo creo que la ejercieron la razón sin moralidad y es el mundo que tenemos por ejemplo los gobernantes no tienen moral para ejercer poder para beneficiarse, también los bancos internacionales y la ciencia no tiene marco de referencia, ni límite … por eso tenemos moneda fiat pedazos de papel pintado para generar guerras y saqueos de los países pobres de sus recursos ….

  31. Marco Lopez · 14/04/2018 Responder

    Como se genero la mansedumbre de millones de personas ?

  32. Fco. Manuel Espinosa · 21/10/2018 Responder

    .
    Somos unos afortunados de vivir en un momento histórico en que la educación está al alcance de una conexión a internet y de tener como congéneres a personas tan generosas como el maestro Darin.

    Un saludo desde España.

    🙂

  33. Mario · 07/02/2020 Responder

    El análisis histórico del profesor Mc Nabb es excelente y me ha posibilitado una comprensión muy completa de la época que antes de leerlo yo no tenía. Muchas gracias Darin!

    Ahora, si hoy por hoy se pretende sostener que la Religión no tiene argumentos racionales como se sostenía hace 200 años, me permito citar al teólogo Hans Küng que dice lo siguiente : “Dios es una necesidad racional del hombre frente a una realidad que -sin Dios- carece de sentido. El problema metafísico del “sentido”, que estaba fuera del alcance del pensamiento iluminista, no se resuelve sin el concepto de “Dios”. Pero aún así, creo que el error de fondo consiste en no querer entender que Dios es una experiencia que se vive, no un concepto que se razona. El día en que tantos amigos racionalistas y ateos logren vivir la experiencia (o una fuerte intuición) de Dios, comprenderán, quizás, por qué creen los que creen. Abrazo

  34. Miguel Samuel · 11/05/2020 Responder

    Qué dificil.

  35. Mario · 16/07/2020 Responder

    Hola Darin. He vuelto a estudiar este video para un trabajo sobre “conocimiento y gestión”. Y aunque me siento un existencialista cristiano, creo que no se puede entender la fe sin comprender también lo que pensaban los genios como Kant. El objetivo de Kant en este libro -como bien decís al final del video- es preguntarse bajo qué condiciones se puede razonar sobre Dios. Kant ni siquiera sospechaba que el Dios vivo de los creyentes (no el de los teólogos) no es un concepto que se razona sino una experiencia que se vive (o no se vive, claro). Algún día los filósofos de la Pasión (con Kierkegaard a la cabeza) estarán al mismo nivel que los filósofos de la Razón, como Kant. Abrazo

  36. Betina · 13/02/2022 Responder

    Hola Darin, que edición recomiendas comprar de la Crítica de la Razon Pura? Encontré estas ediciones y se por experirncia de haber lído a aristóteles que una mala traduccion lo arruina todo.
    Aqui la lista de las que encontré.

    Crítica de la razón pura. Trad. de Manuel García Morente. Madrid, Tecnos, 2002.
    Crítica de la razón pura. Trad. de Pedro Ribas. Madrid, Alfaguara–Santillana, 1997 (13ª ed.). I
    Crítica de la razón pura. Trad. de Mario Caimi. Buenos Aires, Ediciones Colihue, 2007 (1.ª ed.).
    Crítica de la razón pura. Edición bilingüe. Traducción, estudio preliminar y notas de Mario Caimi. México:
    Crítica de la razón pura. Introducción, traducción, notas e índices de Pedro Ribas. Madrid, Taurus, 2016

    Muchas gracias. Saludos, Betina

    • Darin · 13/02/2022 Responder

      Confieso que no he revisado todas esas ediciones, y tampoco leo bien el alemán así que aun cuando las hubiera revisado no podría cotejarlas con el alemán bien. La que he usado yo es la de Morente, dicen que es buena.

  37. Eleuterio Castri · 25/04/2022 Responder

    Me he puesto a leer un poco acerca de fundamentos para prepararme un poquito para poder disfrutar de estos platillos.

  38. Jose Mari · 21/01/2023 Responder

    Te escucho por las mañanas mientras voy paseando al trabajo, ¡es todo un privilegio!. Muchas gracias

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